Diputados de Reino Unido elaboraron un informe que visibiliza los errores en la gestión inicial de la pandemia, que costaron más vidas de las debidas.

AGENCIEl Gobierno de Reino Unido y sus asesores científicos cometieron “grandes errores” en su respuesta inicial a la pandemia de COVID-19, con una estrategia “equivocada” que provocó que murieran más personas de las que debían, según revela un informe.

El documento “Coronavirus: Lecciones aprendidas hasta la fecha“, elaborado por las comisiones parlamentarias de Ciencia y Tecnología y de Sanidad y Cuidado Social, lamenta que el enfoque inicial del país ante la crisis se basara “inflexiblemente en un modelo de la gripe”.

Los diputados critican que la primera estrategia contra COVID-19 se apoyara en “un planteamiento gradual” a intervenciones como el distanciamiento social, el aislamiento y los confinamientos, “un error” que derivó en una mayor cifra de muertes por el virus.

“Las decisiones sobre confinamientos y distanciamiento social durante las primeras semanas de la pandemia y el asesoramiento que llevó a ellos, se considera uno de los fracasos de la sanidad pública más importantes que haya experimentado nunca el Reino Unido“, señala el documento.

Ahora ha quedado claro, agregan los diputados, que esto fue “la política equivocada, y que llevó a una cifra inicial de muertes mayor de lo que habría resultado de una política inicial más empática.

En una pandemia que se propaga con rapidez y de forma exponencial, cada semana cuenta”.

Sobre el controvertido tema de la inmunidad de grupo, planteamiento polémico debatido al comienzo de la crisis, se señala que si bien no fue una estrategia oficial, desde el gobierno se buscó “tan solo moderar la velocidad de la infección, mediante la población, aplanando la curva de contagios en lugar de optar por medidas que frenara la propagación del virus”.