El infante tenía una discapacidad cognitiva, subió y bajó del escenario con total libertad.

AGENCIAS.

Un niño de 10 años se robó la atención del papa Francisco durante su audiencia general en la gran sala Pablo VI del Vaticano.

El menor de edad se acercó al pontífice sorpresivamente, ante esto, el personal de seguridad no intentó detenerlo.

De acuerdo con información proporcionada por AFP, el infante tenía una discapacidad cognitiva, subió y bajó del escenario con total libertad.

Mientras lo veía se le acercó, tocó su casquete de seda blanco, el cual es usado únicamente por los papas y el niño se lo pidió varias veces.

EL NIÑO DE 10 AÑOS ESTUVO SENTADO A LA DERECHA DEL PAPA


Ante el ánimo del niño, el papa Francisco lo tomó de las manos, le sonrió y conversó con él, monseñor Leonardo Sapienza, jefe de protocolo, se levantó y le cedió su silla situada a la derecha del pontífice, cuando el menor se calmó se sentó en este lugar reservado a los cardenales e instantáneamente el chico empezó a aplaudir.

La insistencia y el ánimo del niño dio sus frutos, ya que bajó con el solideo, que es el tradicional gorro de color blanco que usan los papas tras la audiencia, el pequeño regresó a su lugar en el público a un lado de su madre.

Antes de comenzar con la catequesis, el papa mencionó y resaltó las acciones del niño, pues expresó que el menor ve a la iglesia como su hogar “este niño tuvo la libertad de acercarse y moverse como si estuviera en casa”.

Además, agradeció la acción del niño “agradezco a este niño la lección que nos ha dado a todos. Y que el Señor le ayude en su crecimiento, porque dio este testimonio que le salió del corazón”, dijo el papa Francisco ante el hecho suscitado el 20 de octubre.