Un supuesto bolso que Inés Gómez Mont le obsequió a Galiela Montijo en 2014 ha salido a la luz ¿Cuánto cuesta?.

AGENCIAS.

Inés Gómez Mont y su marido Víctor Álvarez Puga siguen prófugos desde hace casi dos semanas, y ahora de nuevo su nombre destaca en las redes sociales por un supuesto bolso que le regaló a su amiga Galilea Montijo y el cual valdría más de cuatro millones de pesos.

Galilea Montijo habla sobre el caso de Inés Gómez MontUna foto publicada en 2014 por Gómez Mont es la que vuelve a poner en el ojo público a ambas conductoras ya que en la imagen se ve el costoso regalo que una le obsequió a la otra.

Mont dijo que el bolso que se ve en la imagen fue un regalo de ella a Galilea durante la navidad de 2013.»¡Mana, me encantó verte con el detalle que te di de Navidad! Jaja, I love you», se lee debajo de la imagen publicada por Gómez Mont.

Según las especificaciones, es un bolso Birkin 35 con estilo de cocodrilo, cuyo precio puede oscilar de entre los 2 hasta los 4 millones de pesos mexicanos.Actualmente Gómez Mont y su esposo, Víctor Manuel Álvarez están siendo buscados por la Interpol, pues se les acusa de delincuencia organizada con fines de «lavado» de dinero, operaciones de procedencia ilícita y peculado. Sobre el caso, Galilea Montijo se ha negado a hablar afirmando que “no sabe del tema” y quiere evitar rumores.

Inés Gómez Mont y Galilea Montijo, una amistad polémicaA pesar de que en los últimos años Inés Gómez Mont y Galilea Montijo presumían su amistad en redes sociales, esta buena relación no siempre fue así, en 2008 Gómez Mont hizo una fuerte declaración sobre la conductora de «Hoy».

En aquella ocasión, con el afán de defender a Pedro Sola, Mont le recordó algunas cosas a Montijo en televisión: «Galilea Montijo lo que más desea en este mundo es casarse, todos le dan anillo y todos la mandan a volar, ¿no se han fijado? Todos…quisiera también andar con un hombre adinerado y con poder en Televisa, también es una mujer que le falta mucha educación y aparte, si se atreve a decir ‘doña Pedro y que te pongas ahí a tejer chambritas, yo también te quiero recordar que eres doña teibol, hay que recordártelo, ¿no?».