Este sábado se cumplen 15 días del secuestro a las afueras de Puerto Príncipe, en Haití, de 16 misioneros estadounidenses y un canadiense.

Se cumplieron este sábado dos semanas del secuestro en Haití de 16 misioneros estadounidenses y un canadiense, raptados por una banda armada tras visitar un orfanato a las afueras de Puerto Príncipe, y las opciones de una pronta liberación aún son inciertas.

El grupo de misioneros y sus familias, miembros de la organización Christian Aid Ministries, fueron raptados por el grupo criminal 400 Mawozo, que pide un rescate de 17 millones de dólares, uno por cada víctima.

Miembros de la misión de Christian Aid Ministries en Haití dijeron este sábado a Efe que están consternados por el secuestro de sus compañeros, de los que aseguran no tener ninguna noticia.

La organización religiosa
A los terrenos propiedad de esa comunidad religiosa a la que pertenecen, con sede en Ohio, se llega por un camino polvoriento a una hora de la capital, en la localidad de Titanyen.

Al percatarse de la presencia de periodistas en el exterior de la extensa finca, delimitada por una vaya metálica con alambre de espino, dos miembros de la misión se acercaron para cerciorarse de que no se divulguen imágenes de sus rostros, por su seguridad.

Afirmaron que en la comunidad están consternados por el rapto del grupo, conformado por seis hombres y otras tantas mujeres, así como por cinco niños de entre ocho meses y 15 años de edad, todos ellos residentes en Haití, aunque unos llevaban más tiempo que otros en el país.